Se hace raro, porque apetece volver por la gente que dejas allí, pero personalmente esto me ha encantado y preferiría que fueran ellos los que vinieran aquí. Pero la realidad es otra, así que hay que pararse a pensar un rato, hacer planes y volverse cuando aún se tienen ganas de más.
Son muchas cosas en la cabeza (es lo que tiene no tener tele), así que nada mejor para despejarse que salir trotar un poco. Y es que a Seattle ha llegado el verano, y el gimnasio se me hace pequeño. Pero bueno, ha cumplido su misión, ya consigo correr un rato sin querer morir..., que viene a ser lo que sentía hace 4 meses, je je.
Ya hacía mucho que no tenía a mano un sitio tan chulo para correr...desde los tiempo de salir a correr en Las Palmas con mi hermano por la cornisa o con colegas por el parque Romano
vista desde "la cornisa"El caso es que apenas dos calles más abajo de donde vivo comienza una ruta para correr
bordeando muelles de madera, y luego por parques con sitios de esos que apetece parase a mirar el mar (sigo llevando dentro un canario), de repente hay unos trenes, mogollón de gente en patines, con bicis, corriendo...(o con sus porritos también, cada uno disfruta como quiere...)
bordeando muelles de madera, y luego por parques con sitios de esos que apetece parase a mirar el mar (sigo llevando dentro un canario), de repente hay unos trenes, mogollón de gente en patines, con bicis, corriendo...(o con sus porritos también, cada uno disfruta como quiere...)lástima no haberlo conocido antes.
Menos mal que me lo enseño una adicta al "i-running...
¡¡¡¡gracias!!!!

Pues eso, que hoy me he hartado a correr y pienso tomarlo como costumbre, que la ruta lo merece.
¡Uff, como me voy a acordar de estos mesecillos por la costa oeste!
Conste que las fotos de hoy no son mías, pero todo se andará...en cuanto me apañe para llevar la cámara al salir a correr ;)
Resultados de hoy:
distancia: Chupicientas millas hasta el muelle 89 o así
tiempo: el justo para evitar un infarto
¡Mañana más!






